El contexto de contracción económica frena la toma de decisiones en sanidad

Las crisis económicas, como es evidente, no ayudan a las sociedades a avanzar en la toma de decisiones relacionadas con el ámbito médico. Muy al contrario, tal y como señaló la catedrática de Filosofía Moral y Política de la UNED Amelia Valcárcel en el evento de Healthinking, “ [el contexto de contracción económica] supone un freno para poder tomar algunas decisiones que, sin embargo, sabemos que deberíamos tomar”.

Dichas resoluciones son, en muchas ocasiones, económicamente racionales, tal y como destacó esta Honoris Causa por la Universitat de València. “Por ejemplo, nos va a salir mucho más caro socialmente que alguien sea medicalizado como si fuera a vivir cuando de lo que se trata [en caso de fase terminal] es de ayudarle a morir”.

Sin embargo, este tipo de actuaciones precisan de una profunda reflexión social, pues, para aplicarlas, deberían darse cambios normativos. En tal caso, tendría que existir (por citar solo una de las transformaciones que serían necesarias) la posibilidad de que una persona pudiera decidir si quiere ayudar a un amigo o pariente a pasar por ese tránsito.

Además, sería imprescindible que ese amigo pudiera tener “5 días libres por esta circunstancia y 2 más para recuperarse del trauma”, añadió la exconsejera de Educación, Cultura, Deportes y Juventud del Gobierno asturiano. Este solo es un ejemplo del tipo de debates que, como sociedad, debemos llevar a cabo en el ámbito de la sanidad “si queremos ordenar estos aspectos”.