Nadie es completamente independiente de su contexto y circunstancias sociales, eso es evidente. Y menos aún durante un ingreso o tratamiento clínico, tal y como destacó Rafael Bengoa, codirector del Instituto de Salud y Estrategia (SI-Health).
Por ello, “es necesario integrar los servicios sociales y sanitarios”, destacó el que fue asesor en salud de la administración Obama. De hecho, tal y como señalaba Amelia Valcárcel en sus reflexiones durante el evento de Healthinking, quizá este es uno de los debates básicos para seguir avanzando como sociedad.
Ambos mundos, el social y el de la salud, “son dos vasos comunicantes”, según Bengoa. En otras palabras, estos dos ámbitos se vinculan e interrelacionan de diversas maneras. “Una persona es “social” es unos momentos y en otros es enferma, y en ambos casos se están recibiendo servicios separados”, comentó el considerado uno de los impulsores del servicio vasco de salud Osakidetza.
La unión de estos sectores no solo derivaría en beneficios para la sociedad en su conjunto, sino también en ventajas económicas. “Siendo muy pragmáticos, se pueden empezar a recibir servicios de manera conjunta”, determina Bengoa.